viernes, 18 de abril de 2014

Oscuro Panorama del Futuro en Argentina



El pasado lunes 14 la presidenta de la ‘década robada’, como la llaman con propiedad últimamente, inauguró otra perla del collar con que la ‘arquitecta egipcia’ espera inmortalizar su memoria. Allí, en la ‘Casa Rosada’ inauguró el salón de los ‘Pueblos Originarios’, de acuerdo al nomenclador imaginario y progre que busca imponer. Este salón se llamaba anteriormente Cristóbal Colón pero fue refaccionado durante un año y re bautizado según la mitología kirchnerista. Se agrega uno más al currículo del derroche de fondos de la arquitecta egipcia a los 7 anteriores: Mujeres Argentinas, Eva Perón, Científicos, Patriotas Latinoamericanos, de los Pintores, Martín Fierro, y la Galería de los Ídolos Populares. Ha gastado pues, millones de pesos restados a la obra social tan necesaria para satisfacer su ego de soberana del subdesarrollo, como típica autócrata de país subyugado por caudillo de turno. 

A esta tropelía auto celebratoria y dispendiosa se debe adjuntar el monumento al derroche que construye en el ex palacio del Correo Central como corresponde a sus sueños de zarina criolla para el cual, luego de varios años de refacciones tiene presupuestado gastar más de 650 millones de pesos en 2014 (algo más de 80 millones de dólares americanos al cambio actual oficial), y sigan pagando los argentinos estos caprichos. Seguramente ELLA sueña ser recordada por estos monumentos, como Napoleón I por el Arco de Triunfo.

Después de anunciar algunas reducciones en la carga tributaria al trabajo en relación de dependencia que unánimemente los expertos consideran tendrán solo un efecto marginal en la reducción del trabajo no registrado, la reina se dedicó a auto justificarse, bajo la apariencia de honrar a los recientemente fallecidos Laclau y Alfredo Alcón. Allí, después de una larga perorata de carácter histórico de un revisionismo sesgado y ramplón quiso convencernos que los enfrentamientos entre argentinos no los incentivaron los Kirchner sino que son algo ancestral que viene desde 1810. Como siempre, los Kirchner no son responsables de ninguno de los problemas actuales, todos vienen de antes y ellos TODAVÍA no los pudieron solucionar. CINISMO descarado si lo hay.

En el colmo de la desfachatez repitió a continuación la treta a la que nos tiene acostumbrados: fingir que pide consejo para mejorar su gobierno y luego negar toda posibilidad de aceptar sugerencias por considerarlas superfluas o porque no hay interlocutores aptos para hacerlas. Esta vez puso como ejemplo medidas que tomó la familia K y que, según ELLA, son la perfección y no deberían tocarse. Allí mencionó el delito, la suba de precios, las paritarias (supuestamente libres y sin topes, aunque no aprueben acuerdos como el de UATRE), Aerolíneas Arg., YPF, y claros focos de problemas y semilleros de errores garrafales del gobierno K. Por supuesto, después de este alegado pedido de sugerencias, pasó a otra cosa sin abrir ningún canal de diálogo en lo que no tiene el más mínimo interés. La víbora sigue envenenando la sociedad argentina con sus insidias.

Decididamente, contra lo que algunos empresarios y banqueros creen o fingen creer, no hay que esperar ninguna iniciativa de cambio importante de este régimen que solo se ocupa de preparar el camino para su supervivencia fuera del gobierno tras 2015.

¿Qué nos queda entonces para DESPUÉS del 2015? Nada muy esperanzador, como veremos.

Empezando por la base, la conciencia del pueblo sigue adormecida después de la digestión de la fiesta de la ‘década robada’. Hemos dilapidado gran parte del capital físico y moral de la República para mantener la fiesta K y pocos son conscientes de la situación en que nos encontramos. El país está sumamente empobrecido, con todo su capital de infraestructura deteriorado y su capital humano empobrecido y embrutecido. Los contrastes de riqueza se han agrandado, y queda una minoría que ha sido beneficiada por el régimen y es la que hace usufructo de la riqueza acaparada en estos años y es protagonista de todo el menú de feriados, sitios caros, barrios exclusivos (como Puerto Madero), vacaciones frecuentes, viajes al extranjero y otros lujos. Algunos signos del derroche, como los autos caros importados y las vacaciones baratas han dejado de estar disponibles para muchos, primeros síntomas del derrumbe progresivo del modelo. Pero pocos tienen conciencia de que esto sigue y va a seguir agravándose. Los primeros asomos de protesta, los paros generales, los votos cada vez más generalizados a los partidos de extrema izquierda, el copamiento de los centros de estudiantes universitarios por agrupaciones filo marxistas en las grandes universidades estatales, el florecimiento de los piquetes por cualquier motivo, la multiplicación de ocupaciones de terrenos y viviendas por los carenciados, para no hablar de la cantidad de jóvenes ni-ni y adolescentes captados por la droga. Todo muestra que la tormenta se está gestando, CFK solamente preocupada por llegar indemne a diciembre de 2015 y ‘después de mi el diluvio’.

Veamos ahora el estado de conciencia económica del pueblo. Quiénes son responsables de la inflación? La mayoría le atribuye la culpa a los empresarios (esta es la coartada de CFK). Otra gran parte culpa al gobierno pero más por falta de control. Resumiendo, no es que nos gastamos todo, la riqueza, seguimos creyendo, florece allí, lo que falla es la distribución. Agreguemos: como un 40% opina que hace falta meramente retocar el programa kirchnerista para encauzar la economía. Agreguemos como 20% de fieles conformes con la Kaconomics y otro 20% de la izquierda tipo FAP seguidores de aún más estatismo. En total, tenemos entre 60 y 70 % de la opinión creyente en que con un retoque al modelo K las cosas se vuelven a encaminar favorablemente. Hasta aquí, total rechazo al obvio futuro de privaciones que se viene inexorablemente.

Todo congruente con otras encuestas que dan como 50-60% de gente sostenedora del estatismo tanto empresarial como controlador y burócrata.

Si lo vemos por el lado de los posibles candidatos tenemos: S Massa, que, hasta ahora, parece ser un rebrote del corporativismo pero menos inclinado al intervencionismo estatal; D Scioli es el notorio heredero del kirchnerismo pero en su vertiente ‘prolija’. Su gestión provincial se caracterizó por surfear la coyuntura, con reacciones esporádicas que se desarman con el tiempo; Macri parece inclinarse por el desarrollismo y arrastra una serie de seguidores cuya ideología es vagamente ‘centrista’ por decir algo, con economistas como Sturzenegger que parecen proclamar que es fácil hacer resurgir Argentina, algo como ‘una cosecha buena y nos salvamos’. No se sabe si lo dicen en serio o es por no espantar a los votantes. Después tenemos un amplio espectro de izquierda socialdemócrata como el FAP o marxista, de quienes cabe esperar un refuerzo del intervencionismo estatal o aún más ataques a las empresas.

Resultado: llegaremos a votar en 2015 en la más grande ignorancia de la gravedad de la situación social y económica, no solo del momento sino por la tendencia al deterioro creciente. Salvo muy pocas excepciones los líderes de opinión o ignoran o evitan hablar de los serios problemas que habrá que enfrentar y crean falsas ilusiones de facilismo. Muy parecido a la llegada de la Alianza que ganó las elecciones del fin de siglo de la mano de la UCR y el FREPASO.

Falta agregar al papa Bergoglio que culpa al mercado de los males del mundo y pide más intervención estatal para auxiliar a los pobres, según dice en el camino señalado por Jesús, y repartir las riquezas (la escasez no sería problema) y dejar de idolatrar al dinero. Para esto exhorta a los ricos a respetar y promocionar a los pobres, lo que no deja de señalar el fracaso de las iglesias en transformar al hombre. Ignorar que la libertad de los mercados puede usarse tanto para bien como para mal supone que hay que pedir un vigilante detrás de cada uno de nosotros que nos diga que hay que hacer en cada decisión o bien que decida por nosotros, suponiendo que tal vigilante divino en sus intenciones exista.

Bergoglio no hace más que darle una cátedra internacional y eclesiástica al ideario peronista clásico de humanizar el capital. Los peronistas en este campo de prueba argentino nunca lo lograron, ¿que hace que Francisco piense que puede intentarse a escala universal?

El entusiasmo franciscano ha invadido a muchos argentinos y es parte de la ilusión mayoritaria de que basta un pequeño retoque para emparejar todo y recibir las bienaventuranzas celestiales para lograr un feliz fin de la década. Amén.

Visto y considerando que abundar sobre la inepcia estructural del kirchnerismo para cambiar de rumbo y al estado general del país, pensamos clausurar estos temas sin otro asunto de mayor novedad e interés de este tenor para tratar.

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